QUITO.- La aplicación del Plan Nacional de Prevención y Lucha Contra la Corrupción, hecho público ayer por la Función de Transparencia y Control Social (FTCS), le costará a los ecuatorianos 17,5 millones de dólares. El objetivo es sentar las bases de una cultura de transparencia no solo en el ámbito estatal sino en el privado con la participación ciudadana.
El plan, que contiene 27 proyectos a desarrollarse en un período de cuatro años (2017), fue presentado en un acto público al que asistieron las principales autoridades de las entidades que integran la FTCS (Superintendentes de Bancos, Economía Popular y Telecomunicaciones, Contralor, Defensoría del Pueblo, Consejo de la Judicatura y Consejo de Participación).
Los objetivos
El presidente de la FTCS, Fabián Jaramillo, habló de otros tres propósitos y caminos que persigue este plan: incrementar la eficiencia y la aplicación de mecanismos de prevención contra la corrupción con herramientas técnicas y tecnológicas; garantizar y cumplir los derechos individuales y colectivos mediante la aplicación de políticas de participación ciudadana; y, crear espacios adecuados de participación ciudadana que en forma directa vigile la actuación de sus mandatarios.
Los 27 proyectos, cuyo costo será de 17´557.664 dólares, están repartidos entre las diferentes entidades que conforman la FTCS. Entre los más costosos están: el de la Superintendencia de Bancos con la campaña de posicionamiento estratégico de cultura financiera que valdrá 3.4 millones de dólares.
Le sigue la campaña Únete al Control, a cargo de la Contraloría con 2 millones; mientras que la Superintendencia de Telecomunicaciones tiene previsto la creación de un Centro de Respuesta a Accidentes informáticos a un costo de 1.3 millones; y, la campaña Apoyo y Estimulación de las Capacidades Participativa de la Ciudadanía que costará 3.4 millones.
Con estas y otras iniciativas, según Jaramillo, se busca establecer cambios en las estructuras para que el Ecuador alcance el buen vivir conforme lo establece la Constitución. “Pero quiénes son transparentes y honestos. Es la persona que vive lo que predica y habla lo que piensa”, sostuvo.
Además, mencionó que en la propuesta participaron más de dos mil organizaciones sociales y estatales que creen en un pacto social para alcanzar y mantener una sociedad libre de corrupción.
Fustiga a Tranparencia I.
Fabián Jaramillo aprovechó la oportunidad para fustigar a los organismos como Transparencia Internacional (TI) en cuyas mediciones ubica al Ecuador entre las naciones más corruptas del mundo. “Se ha pretendido darnos a todos los ecuatorianos el calificativo de corruptos. Esto es inadmisible, más aun cuando se originan en lugares donde hay los mismos o peores males”, subrayó.
El vicepresidente de la República electo, Jorge Glas, dijo que la lucha contra la corrupción debe ser una política de Estado, donde el pueblo que es el mandante debe ser el fiscalizador del poder político en ejercicio legítimo de su derecho a la participación.
“Querido amigo Fabián Jaramillo, no hagamos caso a esas clasificaciones que tratan de desmerecer al pueblo ecuatoriano y a un proceso político transparente por parte de poderes fácticos internacionales”, dijo Glas en referencia al último informe de la referida ONG.
Fuente : Diario el Mercurio